Apocalípsis: Cae La Noche / The Stand – The Night Has Come

Cómic en tapa dura. 6 de 6

Publicado el año 2012

160 páginas

RESUMEN

Cómic basado en la épica novela Apocalipsis. En versión original son 6 tomos de unas 160 páginas. En castellano existen las opciones de 6 tomos, o condensados en 3 tomos.
Es una gran adaptación del libro con un desarrollo inicial de la pandemia y una presentación de personajes excelente. El dibujo es realmente bueno, y el guion, partiendo de la base que parte…

El conflicto definitivo entre el Bien y el Mal alcanza su cénit. En este largo tomo (está compuesto por un capítulo más que el resto) Los tres espías enviados a infiltrarse en el ejército de Randall Flagg han llegado a su destino. Pero ¿y si hubieran subestimado el poder del Hombre Oscuro?
Vemos su estancia en el territorio de Randall Flagg, pero también el viaje de los 4 miembros del consejo de la zona libre (Stu, Glen, Larry y Ralph) así como conocemos el destino que RF ha reservado para Nadine Cross y Harold Lauder.

En este último tomo de Apocalipsis se han producido un par de alteraciones con respecto al libro original que me han parecido muy interesantes.

Una escena casi al final, cuando RF está a punto de ajusticiar a Larry Underwood y Ralph Bretner, sale entre el público una voz discordante, solo una. Es de Whitney Horgan, el cocinero del MGM y este dice:

—¡Esto no es justo! —vociferó Whitney—. ¡Sabéis que no lo es! (…)—¡Alguna vez fuimos americanos! —rugió—. Los americanos no se comportan así. Yo no era nadie, lo confieso, sólo un cocinero, pero sé que los americanos nunca prestarían oídos a un loco asesino con botas de cowboy…

En el cómic esto aparece tal cual, pero se cambia el nombre del personaje y sus facciones nos recuerdan a alguien.

 

Pero la cosa no acaba aquí. Un poco más avanzada la historia Stu Redman y Tom Cullen necesitan un coche desesperadamente y (en la novela) ven un Plymouth de 1970. Tiene las llaves puestas a nombres de un tal A. C. y combustible y batería operativa.

Pero en la cabeza del dibujante (¡que conoce muy bien la obra de King!), se le encendió la bombilla al ver Un Plymouth y las iniciales A. C. (Arnie Cunningham?) y les proporcionó este coche 😉