Escribo esto mientras miro mi ejemplar que me espera en esta misma mesa sin ser más que hojeado aún. Creo que es el momento de leerlo.
La (larga) introducción de King explica no solo como se llegó a fraguar este Coffee table book sino también la sorpresa que tuvo King cuando a raíz de prepararlo se dio cuenta de cuantas y cuantas gárgolas existen en los edificios de Nueva York.
Y de eso va, de acompañar con un largo texto a modo de introducción (de más de 30 páginas) a un álbum de fotos de decenas de Gárgolas neoyorkinas. Al final del libro hay un índice con la ubicación de todas ellas y se numeran 128.